INFORMACIÓN
Si se detectan resultados positivos, disponemos de un servicio médico especializado para indicar el tratamiento a seguir.
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Si se detectan resultados positivos, disponemos de un servicio médico especializado para indicar el tratamiento a seguir.
– No hace falta ayunas en ninguna de las pruebas –
Síntomas
Las enfermedades de trasmisión sexual o las infecciones de trasmisión sexual pueden presentar diversos signos y síntomas, incluso la ausencia de síntomas. Es por eso por lo que pueden pasar desapercibidas hasta que ocurren complicaciones o hasta que se diagnostica a la pareja.
Los signos y síntomas que pueden indicar una infección de trasmisión sexual incluyen:
- Llagas o protuberancias en los genitales o en la zona oral o rectal
- Dolor o ardor al orinar
- Secreción proveniente del pene
- Flujo vaginal inusual o con mal olorSangrado vaginal inusual
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Dolor e inflamación de los ganglios linfáticos, particularmente en la ingle, aunque a veces más
extendidos - Dolor en la parte inferior del abdomen
- Fiebre
- Erupción en el tronco, las manos o los pies
- Los signos y síntomas pueden aparecer unos días después de la exposición. Sin embargo, pueden
pasar años antes de que tengas algún problema perceptible, según el organismo que provoque la
infección de trasmisión sexual.
CUÁNDO CONSULTAR AL MÉDICO
Acude a un médico inmediatamente en estos casos:
- Eres sexualmente activo y podrías haber estado expuesto a una infección de trasmisión sexual
- Tienes signos y síntomas de una infección de trasmisión sexual
Programa una cita con un médico en los siguientes casos:
- Cuando consideres comenzar la actividad sexual o cuando tengas 21 años, lo que ocurra primero
- Antes de comenzar a tener relaciones sexuales con una nueva pareja
causas
Estas pueden ser las causas de las enfermedades de transmisión sexual o infecciones de transmisión
sexual:
- Bacterias. La gonorrea, la sífilis y la clamidia son ejemplos de infecciones de transmisión sexual causadas por bacterias.
- Parásitos. La tricomoniasis es una infección de transmisión sexual que la causa un parásito.
- Virus. Las infecciones de transmisión sexual que las causan virus incluyen el virus del papiloma humano, el herpes genital y el VIH.
- Otros tipos de infecciones (los virus de la hepatitis A, B y C, la infección por Shigella y la infección por
Giardia) pueden transmitirse a través de la actividad sexual, pero es posible infectarse sin contacto
sexual.
La hepatitis B se propaga por contacto con fluidos de una persona infectada, como sangre, semen y saliva. Por lo general, el contacto sucede al tener relaciones sexuales con una persona que tiene la
infección o al compartir agujas u otros artículos que se utilizan para inyectar drogas.
La mayoría de las personas se recuperan de la infección de heptitis B sin consecuencias a largo plazo para el hígado. Sin embargo, algunas personas pueden tener una infección crónica (de largo plazo),
lo que puede provocar enfermedad crónica del hígado y cáncer del hígado. Medicamentos antivirales pueden ayudar con casos crónicos
La hepatitis C se propaga por contacto con sangre de una persona infectada. Por lo general, sucede al compartir agujas hipodérmicas u otros artículos que se utilizan para inyectar drogas.
La mayoría de las personas con hepatitis C tendrán una infección crónica. En la mayoría de los casos, medicamentos pueden curar la hepatitis C. Sin tratamiento, la hepatitis C puede conducir a cirrosis o
cáncer del hígado.
Un perfil de hepatitis incluye pruebas de antígenos y anticuerpos de hepatitis:
- Antígenos de hepatitis son sustancias en el virus de la hepatitis que provocan que el sistema inmunitario luche contra el virus
- Anticuerpos de hepatitis son proteínas que produce el sistema inmunitario para ayudar a combatir la infección de hepatitis
- Los antígenos y anticuerpos de hepatitis pueden encontrarse en su sangre incluso si no tienes síntomas de una infección.
¿Qué es la hepatitis C?
afecta a más de 70 millones de personas en todo el mundo, y algunas estimaciones indican que en España pueden existir 800.000 pacientes infectados, aunque muchos de ellos no lo sepan.
Entre un 50-70% de los pacientes infectados desarrolla una Hepatitis crónica y en un 20% de los pacientes progresará a cirrosis en los 10 años posteriores al contagio. Estos pacientes tienen la enfermedad y además la pueden contagiar a los demás.
Cuando la enfermedad está avanzada puede aparecer hinchazón en las piernas y el abdomen, alteraciones de la coagulación de la sangre con aparición frecuente de hematomas o hemorragías por las encías o por la nariz. Algunos varones presentan crecimiento de las mamas (ginecomastia), también pueden aumentar de las glándulas parótidas, o aparecer lesiones de color rojizo en la piel.
La piel toma un tinte amarillento (ictericia), y en estadios avanzados puede tornarse más oscuro.
Otras complicaciones frecuentes son la aparición de varices esofágicas (dilatación de las venas del esófago) que pueden sangrar o la encefalopatía hepática (los pacientes aparecen confusos, adormilados y desorientados).
Personas que hayan recibido una transfusión de sangre o derivados (plasma, inmunoglobulinas, etc) antes de 1990. Después de esta fecha, las pruebas que se realizan a las muestras de sangre minimizan tanto el riesgo que hace muy poco probable el contagio.
Usuarios de drogas por vía venosa. Este subgrupo de pacientes tiene un riesgo muy alto de tener una infección por Hepatitis C. Algunos estudios demuestran que hasta el 80-90% de estos sujetos son portadores de dicha infección.
Portadores de tatuajes: los tatuajes y los ‘piercing’ son un vehículo frecuente de transmisión de la infección. Cuando se realizan en lugares que no cumplen las medidas de higiene exigidas (uso de aguja única para cada individuo, material desechable y esterilización adecuada de los materiales), las posibilidades de contagio son muy grandes.
Antecedentes de intervenciones quirúrgicas, sobre todo, cirugía mayor. El modo de contagio en estos casos puede ser a través de heridas o sangre del personal quirúrgico, si entran en contacto con la sangre del paciente intervenido.